Los niños que acuden a una escuela infantil en el barrio del Pilar empiezan a desarrollar sus habilidades y talentos, a través del juego, desde el primer día. Así, practican actividades que estimulan su sociabilidad, su creatividad, su memoria y su capacidad de aprendizaje en múltiples ámbitos.

Sin duda, una buena escuela infantil en el barrio del Pilar es muchísimo más que un lugar donde dejar al niño. Es un sustancial punto de partida del aprendizaje personal que durará el resto de su vida, el cual debe permitirle llegar a ser la mejor versión de sí mismo que puede llegar a ser.

Modelar con plastilina es una de esas actividades tan atractivas y estimulantes como formativas para tus hijos. De hecho, se ha convertido por méritos propios en una de las disciplinas estrellas de la primera infancia. Los peques se lo pasan en grande con este entretenimiento que, al mismo tiempo, desarrolla gran cantidad de funciones cerebrales que les ayudan a desarrollarse.

En primer lugar, potencia la movilidad fina de sus dedos. Trabajar con plastilina, con arcilla o con cualquier elemento similar les exige pulir su habilidad manual, optimizar la motricidad y mejorar sus acabados. Además, la fantasía cobra vida en ese proceso creador que, en todo caso, resulta creativo e imaginativo.

La mayoría de los chiquitines, por otra parte, se sienten relajados e incrementan su capacidad de concentración cuando se dedican a modelar figuras en plastilina. Su mente queda en blanco y la calma les inunda de una manera muy positiva.

La orientación a los objetivos es otro de los aprendizajes inherentes a esta actividad, ya que deben descubrir, aplicar y sostener los procesos adecuados para alcanzar sus objetivos. Y, en último término, los niños aprenden a gestionar la emoción o la frustración en función del resultado obtenido.

Si quieres mejorar el bienestar de tus hijos, en Peques School te ayudamos a conseguirlo.